¿Naturaleza o territorios? ¿Qué hacer este COP25/COP500?

IMG_9755

En una entrevista en Reporterre el 2017,  Latour apuntó:

« Défendre la nature : on baille. Défendre les territoires : on se bouge. »

(Defender la naturaleza: nos deja boquiabiertos. Defender los territorios: nos movemos. )

Lo que está en cuestión en esta frase es la lucha entre los universales abstractos (incluyendo ese papel de arroz que algunos llaman capitalismo: habría que decir a Marx que a su locomotora de la historia no puede seguirle echando carbón) y una entrada localizada en Gaia. La palabra antropoceno goza de esa misma desventaja: gravemente deslocalizado.  Los territorios, indican al suelo en el que vivimos y nos invitan a seguir las redes en que nos enlazamos.

Y si la actualidad nos aplasta con su cortedad de perspectiva, con el olvido de las verdaderas cuestiones,  el cinismo rampante, la mentira brutal o la economía mezquinando sus basuritas, los territorios oponen a ese peso grave, la liviandad del pájaro que anida en medio de las ruinas.

Ojalá sea esta señal, la que marque nuestra presencia en el COP25. En los albores de 500 años del viaje de Magallanes, bien podríamos decir COP500.

Magallanes no trajo carbón mineral ni desenterró yacimientos. Pero cargó en sus navíos máquinas de carbón orgánico para traer ecosistemas que asfixiaron los nuestros.

En los humos de la catástrofe industrializada,  el gesto localizado hacia los territorios en que se vive en medio de apuros. De eso debería tratar nuestro COP500.

El estado es sólo un estado (en esto Matta* y Latour** tienen gran acuerdo), un momento (siempre  rezagado) respecto de la actualidad.

Guardemos el gesto supinador. Mostremos el gesto constructivo, afirmativo. Lo que no sabes por tí mismo no lo sabes, insistía Brecht.

Lo que no vives, no registras, no debates, ni es vida, ni análisis ni política.

 

*en el sepultado estado/en que está cualquier estado/está en deplorable estado

**Il ne faut pas demander à l’État plus qu’il ne peut donner. Par essence, il s’appelle un « état », un état de choses. Il résout des problèmes qu’on avait mis en place à l’étape précédente. Il est par définition toujours en retard d’une guerre. S’il n’y a pas eu de société civile active capable de le modifier à un moment donné, l‘État, à l’étape suivante, reste « en l’état » justement, sourd à la situation. Reporterre

Dejar un comentario

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s

A %d blogueros les gusta esto: